PARÍS.- El presidente francés, Nicolas Sarkozy, reconoció su derrota y confirmó que dejará la vida política, tal como había advertido durante la campaña electoral. "Otra época se abre, en esa época seré uno de ustedes, un francés más, mi lugar ya no será el mismo. Después de 35 años de vida política y 10 años en las máximas responsabilidades del Estado (cinco años ministro y cinco presidente), mi compromiso en la vida del país será diferente", aseguró el actual mandatario.

Sarkozy en un discurso marcadamente personal brindado desde la sala de conferencia La Mutualité en París, dijo: "hablé por teléfono (con Hollande), lo felicité y le deseé buena suerte pues será difícil. Pero deseo de todo corazón que Francia resista las difíciles pruebas que deberá afrontar".

El ahora mandatario saliente interrumpió los silbidos de sus simpatizantes hacia Hollande pidiendo respetar "la investidura del presidente electo democráticamente, no seamos como quienes tanto me atacaron". "Demos el ejemplo, no miremos a nuestros adversarios como nuestros enemigos. La vida está llena de sucesos y derrotas, seamos dignos, democráticos, patriotas, lo contrario de la imagen que algunos habrían dado en una situación inversa", remarcó.

Sarkozy es el décimo tercer jefe de Estado de la zona euro que pierde el poder desde 2009, cuando los efectos de la crisis financiera comenzaron a sentirse en la región, entre ellos el griego Georges Papandreu, el italiano Silvio Berlusconi, el español José Luis Rodríguez Zapatero, pero también los mandatarios de Irlanda, Letonia, Hungría, Ucrania, Portugal y Eslovaquia.

"Porto toda la responsabilidad de esta derrota, porque soy un hombre que asume sus responsabilidades. Soy el presidente, el jefe y cuando hay una derrota es el numero 1 el que la tiene que asumir", aseveró. Sin embargo, consideró que realizaron "una campaña inolvidable, contra todas las fuerzas unidas en nuestra contra". (NA-Télam)